impredecible
-
El tiempo es efímero, como un suspiro en el viento, una brisa que nos acaricia sin detenerse un momento. Y es que la vida es un río que fluye sin cesar, llevándose consigo todo lo que hemos de recordar. No hay manera de detenerlo, ni de hacerlo retroceder, y aunque a veces quisiéramos, no podemos
-
La última vez que intenté arreglar mi corazón, jugamos sin cartas, y perdimos la razón, como si el destino hubiera conspirado en mi contra, para hacerme luchar contra la adversidad. A veces siento que me conozco bien, que he visto todos los matices de mi alma, pero sigo siendo un misterio, difícil de prever, como