
Entre la desconexión y la creación: una travesía hacia el autodescubrimiento
Corteza gemida, madera torcida.
Desenvuelve entrañas, abre mil heridas.
Sacrifico ideas y el tiempo no vuelve.
Son miles de notas envueltas en redes.
Mi filosofía es abierta, libreta abierta en progreso.
El cuerpo me sostiene transmutando todos mis huesos.
Sin aire suelo quedarme, no respiro por momentos.
Porque llevo muchos años construyendo un gran templo.
Apagado por momentos, el autómata despacio.
No sigue las reglas, no lo rige un calendario.
Autómata me he vuelto, psicópata desconectado.
Agresivo por momentos, tiempo atrás ya disuelto.
Exploro contenidos, continentes fijos.
Calculo desde lejos detalles inconcisos.
Hablo con la vida de la vida que anhelo, y me responde materializando los deseos de mi pecho.
A veces tiemblo y discuto con mis propios pensamientos, pero siempre se resuelve con el plan que implemento.
Leave a comment